De calesitero a repartidor
La de Mayco es una de las tantas historias de personas que tuvieron que reinventarse en medio de la pandemia.
Desde hace 120 días la tradicional calesita que administra en plaza Pedro Viñas permanece cerrada al público, por lo que tuvo que rebuscarsela y trabajar de repartidor y fletero para poder generar algún tipo de ingreso.
No obstante, y pese a que rechazaron dos veces el protocolo elaborado, asegura que una vez superada está complicada situación, volverá a abrir la histórica atracción para niños de la ciudad y región.